La importancia de hacer un buen Benchmarking en Marketing: definición y aplicación

En el competitivo mundo del marketing, las estrategias efectivas son esenciales para destacar y alcanzar el éxito. Una de las herramientas más valiosas a disposición de los profesionales del marketing es el benchmarking. Esta práctica consiste en comparar y analizar las estrategias, procesos y resultados de una empresa con los de sus competidores y líderes de la industria. A través del benchmarking, las empresas pueden obtener información valiosa que puede ayudar en la toma de decisiones. En este artículo, exploraremos en detalle qué es el benchmarking y cómo se aplica en el ámbito del marketing.

Qué es el Benchmarking

El benchmarking es un proceso sistemático que implica identificar, analizar y enumerar las mejores prácticas y procesos de otras empresas que son líderes en la industria (o que son competidores directos de nuestra empresa). Consiste en comparar las métricas, procesos y resultados propios con los de otras organizaciones para identificar oportunidades de mejora y optimización. El objetivo principal del benchmarking es lograr una ventaja competitiva al adoptar las mejores estrategias y adaptarlas a la propia empresa.

No obstante, ésta sería una aplicación en el área de negocio y/o de marketing, pero hay benchmarking de diferentes tipologías.

Tipos de Benchmarking

Existen varios tipos de benchmarking, cada uno con su enfoque específico y objetivo. Veamos los que se aplican principalmente a las empresas:

1. Benchmarking Interno: Este tipo implica la comparación de diferentes departamentos o unidades dentro de la misma organización. Ayuda a identificar brechas y áreas de mejora dentro de la propia empresa.

2. Benchmarking Competitivo: Aquí se compara el desempeño de la empresa con el de sus competidores directos. Esto permite entender cómo se sitúa la empresa en relación con otros actores del mercado y qué estrategias están adoptando.

3. Benchmarking Funcional o Genérico: Se trata de comparar procesos y prácticas con empresas que no son competidores directos pero que tienen operaciones similares. Esto puede proporcionar nuevas perspectivas y enfoques.

4. Benchmarking Externo: En este caso, las empresas se enfocan en comparar sus resultados y prácticas con las de líderes de la industria, incluso si no están directamente relacionados con su mercado. Esta forma de benchmarking ayudarnos a innovar.

Cómo aplicar el benchmarking en marketing

1. Identificación de objetivos y métricas: Antes de iniciar el proceso de benchmarking, es crucial establecer objetivos claros. ¿Qué aspectos del marketing se desean mejorar? Ya sea para mejorar el producto, definir su precio, el alcance de éste en redes sociales, la tasa de conversión del sitio web o la efectividad de las campañas publicitarias, definir métricas específicas resultará esencial.

2. Selección de empresas de referencia: Elegir las empresas de referencia para el benchmarking es un paso crucial. Deben ser líderes en el área que se está evaluando. Estas empresas pueden ser competidores directos, actores de la industria o incluso empresas de diferentes sectores con prácticas inspiradoras.

3. Recopilación de datos y análisis: Una vez seleccionadas las empresas de referencia, es hora de recopilar datos relevantes. Esto puede incluir información sobre estrategias de marketing, tipologías o características de producto, tácticas publicitarias, canales de comunicación, presencia en redes sociales y resultados de campañas. El análisis de estos datos ayudará a identificar tendencias y patrones.

4. Identificación de debilidades y oportunidades: Al comparar los datos recopilados con los propios, es posible identificar nuestras debilidades. Estas debilidades pueden ser áreas en las que la empresa se queda rezagada con respecto a los líderes del mercado. Del mismo modo, se pueden identificar oportunidades de mejora y posibles estrategias a implementar.

5. Adaptación y mejora: Basándose en los inputs obtenidos a través del benchmarking, las empresas pueden adaptar y mejorar sus estrategias de marketing. Esto podría implicar la adopción de tácticas exitosas de otras empresas, la optimización de procesos internos o la exploración de nuevos canales de comunicación.

Beneficios del benchmarking en marketing

Innovación: Al observar y aprender de otras empresas exitosas, las organizaciones pueden encontrar formas creativas de abordar los desafíos del marketing. En el área de desarrollo de negocio será clave esta herramienta.

Mejora continua: El benchmarking permite un ciclo de mejora continua al identificar oportunidades y permitir su implementación.

Conciencia competitiva: Al comprender mejor cómo se comparan con la competencia, las empresas pueden ajustar sus estrategias para ganar una ventaja competitiva.

Optimización de recursos: Al aprender de otros, las empresas pueden evitar errores costosos y utilizar de manera más eficiente sus recursos.

Conclusión

El benchmarking es una herramienta esencial para cualquier estrategia de marketing exitosa. Al analizar y comparar las prácticas y resultados de otras empresas líderes, las organizaciones pueden identificar oportunidades de mejora y facilitar la implementación de éstas en sus productos, procesos, estrategias, etc.

Si sumamos un enfoque sistemático junto a un compromiso de mejora continua, el benchmarking se convierte en una brújula muy fiable para guiar a las empresas hacia el éxito en su estrategia de marketing.

Por si os sirve de inspiración y ayuda a entender el concepto: hay personas – conocemos al menos a una – que aplican el benchmarking hasta en la compra de electrodomésticos: comparan precios, características de producto, reviews de usuarios que ya lo han testeado, modelos y marcas.